Al finalizar la Guerra Civil Española, el Gobierno franquista decidió construir una gran barrera defensiva en los Pirineos (denominada Línea P) desde el Mediterráneo hasta el Cantábrico, aproximadamente 500 kilómetros de miles de asentamientos fortificados que se llevaron a cabo entre 1944 y 1957, aunque los proyectos ya empezaron en 1939. La línea P la llevaron a cabo aproximadamente unos 12.000 soldados pertenecientes al régimen franquista ya que fue un proyecto calificado como “secreto”. Esta magna obra de fortificación no entró en ningún momento en servicio y realmente tampoco se llegó a concluir. Hoy en día ha quedado totalmente obsoleta y pertenece ya a nuestra historia reciente. Este sendero recorre parte de uno de los Núcleos de Resistencia de la VI Región Militar (País Vasco y Navarra) situado en los concejos de Erro y de Agorreta. Caminando por él se pueden ver y visitar asentamientos de combate (nidos de ametralladora) y asentamientos de artillería (nidos de artillería) estratégicamente situados para controlar tanto la N-135 como otras vías secundarias. Así mismo, el camino incluye una Caseta de Vigías construida con anterioridad a los asentamientos de la línea P.

Este sendero se creó en diciembre de 2013, se desconoce el estado de conservación.